Sin duda, con la llegada del verano, sabemos que no perdona a nadie. De norte a sur del planeta, las temperaturas en algunas regiones rondan los 40 °C, siempre y cuando no suframos olas de calor. Además, quienes viven en zonas costeras aún pueden contar con la brisa marina para aliviar el calor, mientras que otros recurren al aire acondicionado.
Sin embargo, la mayoría de las personas necesitan innovar o encontrar la manera de sufrir menos las altas temperaturas, que nos hacen sudar e interfieren incluso con las tareas más comunes, como dormir. Difícil, ¿verdad? La buena noticia que les traigo en Super Info es que hay cambios sencillos que pueden hacer en la decoración de su hogar para bajar la temperatura en las habitaciones. Vean algunos consejos a continuación.
1 – Invertir en algodón
El algodón es la mejor opción para tus sábanas, especialmente en verano o en climas cálidos. El satén y la seda pueden resultar más frescos por su tacto gélido, pero en realidad abrigan más. Sin embargo, el algodón, al ser una fibra natural, permite que tu cuerpo respire y contribuye a la circulación del aire en el ambiente.
Otro consejo genial es que, para poder dormir con calor, guardes las sábanas en la nevera, envueltas en una bolsa de plástico, por supuesto. El frescor no dura toda la noche, pero debería ser suficiente para relajarte y conciliar el sueño.
2 – Evite subir la temperatura
Seguramente lo que más deseas, sobre todo en verano, es aliviar el calor, no aumentarlo, ¿verdad? Sin embargo, hay varias cosas que hacemos para empeorar la situación sin darnos cuenta. Por ejemplo, cambia las bombillas de colores cálidos por luces frías, como las tiras LED.
Aun así, apaga todos los aparatos electrónicos que puedas, ya que acumulan calor incluso cuando no los usas. También es buena idea evitar el uso del horno: úsalo para preparar una ensalada fría o comidas que se puedan preparar en el microondas.
3 – Tener plantas y áreas verdes
¡No leíste mal! Tener y cuidar plantas es un gran aliado para combatir el calor en interiores, ya que ayudan a refrescar el ambiente. Distribúyelas por la decoración y verás cómo tu hogar se vuelve más acogedor. Además, otro consejo interesante es humidificar el aire. Para ello, puedes usar humidificadores o improvisar, extendiendo cubos de agua o toallas húmedas en el suelo.
4 – Decoración minimalista e inteligente
Aunque no lo parezca, las alfombras y los cojines realzan la decoración de tu sala y, además, retienen el calor, especialmente si están hechos de telas cálidas como el terciopelo. Así que guarda todos estos artículos en un armario y haz que tu hogar sea más minimalista para que tenga una temperatura más equilibrada.
Además, donde la decoración sea esencial, como en las cortinas, cambia las telas gruesas por otras más ligeras, como el algodón. También es recomendable elegir prendas de colores claros, que reflejan la luz y el calor en lugar de retenerlos.
Y a ti, ¿qué te ha parecido nuestra recomendación sobre cómo reducir el calor sin aire acondicionado?
Foto de Carolina Grabowska